En el último minuto del tiempo añadido, en el 102′ y tras la remontada surrealista del Madrid con doblete de Joselu, el Bayern de Múnich, con 1-2 en el marcador en contra y a un gol de forzar la prórroga, colgó un balón al área para que Pavlovic o Müller lo disputaran por arriba.
El mal despeje de Mendy acabó en los pies de Müller, que sirvió el gol a De Ligt, pero el tanto no subió al marcador por un fuera de juego que marcó el árbitro Szymon Marciniak.
El polaco, de manera inexplicable, hizo sonar el silbato antes de que el defensa neerlandés rematara, anulando la acción por fuera de juego con su asistente levantando el banderín antes de que se acabara la jugada.
Los jugadores bávaros, incrédulos ante el despropósito del equipo arbitral, saltaron en masa reclamando la acción con Thomas Tuchel a la cabeza. No sirvió de nada, el árbitro reanudó el juego y los bávaros cayeron en el Bernabéu.
ANCELOTTI HABLA SOBRE LA JUGADA POLÉMICA
El técnico del Real Madrid fue consultado sobre lo que se vivió en los últimos instantes del encuentro y expresó lo siguiente: “El árbitro pita, el línea levanta y nosotros paramos. Se quejan ellos, nosotros nos quejamos del gol anulado a Nacho. Kimmich se tira, se estaban empujando los dos“.