El expresidente argentino Carlos Menem fue absuelto el jueves en el juicio por el entorpecimiento de la investigación del mayor ataque terrorista cometido en suelo argentino contra un centro judío de Buenos Aires en 1994.
El exmandatario (1989-1999) y actual senador opositor, de 88 años, era juzgado desde agosto de 2015 como sospechoso de haber desviado la llamada “pista siria” en el ataque terrorista contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), en el que murieron 85 personas.
La fiscalía había solicitado cuatro años de cárcel para Menem mientras que Memoria Activa, la agrupación que reúne a familiares y allegados de las víctimas, había pedido seis.
En el mismo juicio, fue condenado a seis años de prisión el exjuez federal Juan José Galeano, que tuvo a su cargo la investigación desde un comienzo hasta 2003, por los delitos de peculado y prevaricato mientras que los ex fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia recibieron una pena de dos años de prisión por incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Al mismo tiempo el exjefe de inteligencia Hugo Anzorreguy fue condenado a cuatro años de prisión por peculado y encubrimiento.
Por el ataque a la AMIA no hay ningún condenado. La justicia argentina considera que el gobierno de Irán fue el ideólogo del ataque y ha pedido la detención de varios exfuncionarios y ex diplomáticos que ese país se niega a entregar.
Pero la investigación estuvo plagada de irregularidades, tal como lo determinó un tribunal que en 2004 absolvió a una veintena de personas señaladas como parte de la “conexión local” que participó en el atentado, declaró nulos diversos actos del proceso judicial y pidió investigar la responsabilidad que tuvieron los miembros de la justicia y el gobierno en las maniobras de encubrimiento.