Un preso en régimen de tercer grado y uno de sus compañeros han salvado a una chica de 12 años que estaba a punto de lanzarse desde la muralla de Fuenterrabía, País Vasco, España con la intención de suicidarse.
El incidente se produjo la noche del 8 a 9 de mayo cuando el recluso —que mantuvo su empleo en una compañía de limpieza gracias a que cumple una condena en régimen abierto— y su colega escucharon los gritos de una mujer.
Al aproximarse al lugar de los hechos, conocieron que esa persona intentaba persuadir a su hija para que no saltara al vacío con el argumento de que pensara en su hermana.
Casi en la oscuridad, ambos varones subieron hasta donde se encontraba la menor por dos lados diferentes y, cuando la suicida se distrajo con el reo, el otro hombre la inmovilizó.
“En ese medio segundo que llamé la atención de la niña mi compañero, de forma audaz, saltó y la abrazó por detrás”, contó el recluso.
Tras inmovilizar a la niña chica, los operarios llamaron a la Policía y los Bomberos, que la bajaron del lugar.