Amalia Pérez y el resto de su familia viven momentos difíciles, tras enterarse del trágico final de su hija que migró hacia Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida.
“Es un dolor terrible”, asegura. “Le dije que no viajara, pero ella lo hizo por necesidad”.
Amalia y su esposo, Rogelio Chicas, viven en una humilde vivienda de la aldea Chiquirines, La Blanca, San Marcos, a 100 kilómetros aproximadamente de la cabecera departamental y a 352 kilómetros de la capital de Guatemala.
Los padres de la guatemalteca migrante supieron la triste noticia cuando sus vecinos llegaron a la casa a darles el pésame.
Vecinos y familiares reunidos en vivienda de Amalia Pérez. Foto: Carlos Barrios / Corresponsal Albavisión
La historia
Briseida Liseth Chicas Pérez tenía 20 años. Salió de su vivienda el pasado 08 de junio, acompañada de su esposo, Denilson Omar Recinos Orozco, y sus dos hijos, menores de edad. La pareja decidió migrar “para buscar mejores condiciones de vida”, asegura Amalia Pérez, la madre de Briseida.
Días más tarde, Amalia recibió una llamada telefónica, y era la de su hija, diciéndole: “Mamita ya llegamos a la frontera. Ya estamos aquí con Denilson y los niños. Nos falta poco”. A partir de ese momento, la llamada se cortó y Amalia no supo más de sus familiares.
El trágico desenlace
El pasado domingo, la Patrulla Fronteriza estadounidense reportó la localización de cuatro cadáveres a orillas de Río Bravo y de los Matorrales de Anzalduas, Mission, Texas. Las autoridades de la ciudad informaron que se trataba de una mujer, con apariencia joven, y tres niños. De inmediato se realizaron las evaluaciones correspondientes y ayer Cancillería guatemalteca informó que se trataba de guatemaltecos, específicamente de Briseida Chicas y de tres pequeños.
Se informó, además, de que Briseida falleció con uno de sus hijos, Denison Rolando Recinos Chicas, de año y medio.
Briseida, de 20 años. En sus brazos, su hijo de año y medio.
Los otros niños
Como Juana Anastasia Miranda Aguilar, de 3 años, fue identificada la pequeña que también murió junto con Briseida. Además, otro niño cuya identididad se desconoce y que tenía aproximadamente 7 años. Lo único que se sabe de este menor de edad es que era originario de la aldea El Reparo, Coatepeque, Quetzaltenango, colindante con la aldea Chiquirines, La Blanca, San Marcos.
Juana Anastasia iba acompañada de su madre, que se encuentra hospitalizada en Texas.
El esposo de Briseida y su hija de 3 años lograron llegar a Estados Unidos.
Según el informe del Minex, Briseida y los tres niños murieron aparentemente a causa de las altas temperaturas y falta de agua.
La vida de Briseida
Amalia Pérez cuenta que su hija se casó a los 17 años. Dos años antes, a los 15, ganó el reinado de la aldea Chiquirines.
En la feria patronal de la aldea Chiquirines en 2015, Briseida asumió el reinado.
La casa donde vivía Briseida y su esposo se encuentra a pocos metros de la vivienda de sus padres.