La capacidad de las mujeres guatemaltecas para decidir cuántos hijos quieren tener se ha fortalecido en los últimos 16 años, según lo revela el XII censo de población presentado recientemente.
“En el caso de Guatemala se observa una reducción significativa de la fecundidad”, afirmó Mauricio Guerra, gerente general del Instituto Nacional de Estadística (INE).
De acuerdo con la medición, la población guatemalteca asciende a 14,9 millones y de ese total el 51,5 por ciento son mujeres y el 48,5 por ciento hombres. Lo anterior evidencia “una tasa de crecimiento intercensal” de 2002 a 2018 del 1,8 por ciento, de acuerdo con el estudio.
“En la región nosotros nos quedamos cortos en las proyecciones de fecundidad porque ha bajado mucho más de lo que se preveía”, aseguró Guiomara Bay, representante del Centro Latinoamericano y Caribeño de Demografía (Celade) de la división de población de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Causas de reducción de la fecundidad
“Lo que uno observa en América Latina es que en la medida que van desarrollándose las sociedades y hay un acceso libre a métodos de planificación familiar y a la capacidad de la mujer de decidir cuántos hijos quiere tener, se empieza a observar caídas significativas de dentro de las tasas de fecundidad”, explicó Pablo Salazar, del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA).
Salazar agrega que es una buena noticia en todos los sentidos porque significa que las mujeres están teniendo más capacidad de decisión (de cuántos hijos quieren tener), tienen más posibilidades de participar en el mercado laboral y existe una capacidad más alta de la sociedad de poder darles un mejor nivel de vida a los niños que van naciendo.
No obstante, enfatizó que “siempre hay brechas” dado que se observa “la fecundidad más alta en los niveles de más bajos ingresos económicos” y que normalmente “las familias de altos ingresos tienen mucho menos hijos en promedio que las familias de bajos ingresos”.