Los habitantes de Hallstatt, una pequeña villa en Austria, están cansados de la excesiva llegada de turistas, los que arriban por miles cada día, a pesar de que su población no supera los 800.000 habitantes.
La razón del boom de la llegada de turistas se debe no solo a su increíble belleza. En los últimos años se ha visto incrementada debido a que el pueblo sirvió de inspiración para Arendelle, la ciudad ficticia de Frozen, la popular película de Disney.
“Somos una importante pieza de la historia cultural, no un museo. Queremos reducir el número de visitantes a por lo menos un tercio, pero no tenemos forma de pararles”, ha dicho Alexander Scheutz, alcalde de la ciudad, según señala El Mundo.
Popularidad ha seguido en aumento por el reciente estreno de la segunda parte de la cinta, lo que ha hecho que más de 1 millón de turistas lleguen cada año.
Para hacerse una idea, Hallstatt está recibiendo 10.000 visitantes al día, es decir, seis veces la cantidad de turistas que llegan a Venecia. Esta excesiva llegada de personas a un pequeño pueblo que no tiene la capacidad ni los recursos para albergar tal cantidad, tiene preocupadas a las autoridades, más cuando la villa es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1997.
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