El expresidente del Congreso Pedro Muadi y otras 30 personas procesadas por un supuesto caso de plazas fantasmas en ese organismo hablarán por última vez ante el tribunal en el que se desarrolla su juicio.
Según lo previsto, los implicados harán su última petición a los jueces, de forma previa a que se dicte la sentencia correspondiente.
La Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) acusa al exlegislador de asociación ilícita, peculado por sustracción y lavado de dinero, por lo que pidió al tribunal condenarlo a 35 años de prisión.
Para los otros procesados se solicitaron penas de seis años en adelante, pero la más alta es contra el excongresista.
El caso
Según el MP, en 2013, cuando Muadi fungía como presidente del Parlamento, tenía asignado un grupo de guardias de una empresa privada, quienes devengaban un sueldo de Q5 mil por parte de la compañía.
El exdiputado habría ofrecido a los agentes un pago extra de Q2 mil, los cuales saldrían fondos del Legislativo; a cambio, los elementos debían firmar un contrato por un salario de Q8 mil.
El ente investigador habría determinado que los guardias recibieron esos Q2 mil mensuales y el resto quedó en poder del entonces presidente del Legislativo.
Tal práctica habría representado la sustracción de Q4.3 millones de ese organismo.
Muadi se entregó a la justicia a finales de octubre de 2015, después de que se le retirara la inmunidad, pues para entonces aún era diputado.