Un total de 124 incendios, que han consumido 865 hectáreas de bosques, han ocasionado daños irreversibles en la flora y fauna de áreas protegidas.
Los lugares más afectados son la Reserva de Usos Múltiples de la Cuenca del Lago de Atitlán, Conos Volcánicos del Suroriente del País, Reserva de Biósfera Maya y Parque Nacional Laguna del Tigre, en Petén, así como la Sierra de las Minas y la Cordillera Alux.
El Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap) ha externado su preocupación por estos eventos, pues destruyen los ecosistemas.
De acuerdo con las autoridades, los daños se extenderán pues hay ocho siniestros que se mantienen activos.
Los más afectados
Tepezcuintes, mapaches, venados de cola blanca, huitziziles, coches de monte, pecaríes de labio blanco, así como monos araña, monos saraguate, tapires, osos hormigueros, tacuacines, conejos y jaguares figuran entre los animales afectados.
También gatos de monte, tigrillos, pumas, ocelotes, armarillos, iguanas, lagartijas, serpientes, cocodrilos negros y tortugas blancas. Asimismo, aves cantoras, guardabarrancos, pericas guayaberas, gavilanes, búhos, lechuzas y tapacaminos.
Además, chipes, halcones pecho naranja, loros cabeza azul, guacamayas rojas y variedad de anfibios, que en su mayoría son endémicos.
En cuanto a la flora, el daño predomina en bosques mixtos y de coníferas, como el pino, roble o encino, ilamo, entre otros.
En la Reserva de la Biosfera Maya son afectadas las especies del bosque latifoliado o de hoja ancha, característicos de esos ecosistemas, se informó.