La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, ONUAA, o más conocida como FAO, junto con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), de la Organización de las Naciones Unidas se reunieron con líderes de la región para hablar de las “acciones urgentes” que se necesitan para evitar para la pandemia del Covid-1- se convierta en una crisis alimentaria.
En dicho encuentro virtual, el Sub-Director General y Representante Regional para América Latina y el Caribe de FAO, Julio Berdegué, expuso que Guatemala, se encuentra desarrollando la “Gran Cruzada por la Nutrición”.
Por su parte, Alicia Barcena, secretaria ejecutiva de la CEPAL agrega que Guatemala tiene una dependencia del sector agropecuario del doble del promedio (10% en relación a 5% de la región) y la mayor parte de los productores son familiares e indígenas, por lo que lamenta un impacto inevitable en el sector.
La pobreza extrema en Guatemala aumentará de 19.8% a 21.4%, esos son 3.2 millones de personas en 2019, que pasarán a 3.5 millones en 2020″, dijo Barcena.
Panorama regional
A pesar que Guatemala realiza acciones y programas para ayudar a las familias vulnerables, el aumento de pobreza extrema es algo que se daría en varios países de Latinoamérica y el Caribe, según el reciente informe de “Millones de personas pueden caer en la pobreza extrema y el hambre en 2020 en América Latina y el Caribe debido al impacto de la pandemia”
Según el informe, tras siete años de lento crecimiento, América Latina y el Caribe podría ver la mayor caída del PIB regional en un siglo (-5,3 por ciento), lo que traerá en 2020 un aumento de la pobreza extrema de 16 millones de personas con respecto al año anterior, sumando 83,4 millones en total. El impacto sobre el hambre será también muy significativo, tomando en cuenta que en 2016-2018 ya había 53,7 millones de personas en inseguridad alimentaria severa en América Latina.
Entretanto, el documento comparte que parte de los efectos de la crisis ya son visibles en los sistemas alimentarios por ejemplo: la vulnerabilidad de los trabajadores ha crecido y los precios internos de los alimentos están subiendo más que el precio de otros productos de la canasta básica, según el Índice de precios al consumidor IPC. Por el aumento del desempleo y la caída en los ingresos, millones de personas no están pudiendo adquirir suficientes alimentos, y muchas otras están teniendo que optar por alimentos más baratos y de menor calidad nutricional.
Propuestas
Como en Guatemala y en otros países, se sugiere a los gobiernos comenzar a implementar algo como bono contra el hambre para la población vulnerable y crédito para los productores.
Las otras medidas del decálogo son:
-Reforzar los programas de alimentación escolar para garantizar la alimentación de niños, niñas y adolescentes.
-Apoyar las iniciativas de asistencia alimentaria de las organizaciones de la sociedad civil.
-Apoyo financiero (crédito y subsidios productivos) para las empresas agropecuarias, orientado principalmente a la agricultura familiar.
-Ajustar los protocolos de sanidad y salud en la producción y el transporte de alimentos y en los mercados mayoristas y minoristas.
-Expandir y garantizar el funcionamiento de los programas de apoyo a la producción de autoconsumo.
-Asegurar el financiamiento, la asistencia técnica y el acceso a insumos y mano de obra a los agricultores y pescadores artesanales.
-Establecer mecanismos ágiles de consulta y coordinación público-privada entre todos los actores del sistema alimentario.
-Impedir que los mercados mayoristas y minoristas y las agroindustrias se cierren o disminuyan sus operaciones.
-Continuar con las políticas que han mantenido abierto el comercio mundial de alimentos, en particular evitando medidas proteccionistas que aumenten el precio de los alimentos.