En Guatemala algunas personas que adquirieron un seguro de vida han denunciado a empresas aseguradoras por diversos motivos. Ante esta situación expertos aseguran que para llevar una relación armoniosa entre ambas partes, es importante tomar en cuenta algunos consejos.
Al momento de contratar un seguro médico o de vida, el asegurado debe tener en cuenta que debe reportar si padece de alguna enfermedad pre existente. Si no lo hace, esto puede provocar que las aseguradoras suspendan el pago al asegurado.
Buena Fe, elemento fundamental
Enrique Leal, experto en temas de seguros indica que el elemento fundamental en los contratos de carácter mercantil es la Buena Fe.
Es decir tanto la aseguradora como quien adquiere este tipo de servicios deben dejar en claro todos los puntos y aquí es importante destacar que los usuarios deben exponer situaciones de pre existencia para que sea un respaldo para ambas partes.
Esto significa por ejemplo, en el caso de los seguros de vida que si una persona tiene cáncer y adquiere un seguro, debe dejarlo en claro a la aseguradora al igual que otro tipo de situaciones y enfermedades.
Leal resalta que es precisamente en esta falta de información que se registra un quiebre entre ambas partes, porque el cliente o sus deudos esperan un beneficio económico y al final no se obtiene.
Es aquí donde los asegurados se sienten engañados y establecen una demanda o queja, pero la entidad aseguradora que a decir del entrevistado, en un 90 por ciento de los casos tiene la información total de sus clientes, termina demostrando el punto de fallo.
Dos vías para resolver problemas con la aseguradora
El experto en temas de seguros, indica cual es la vía legal para poder solucionar cualquier inconveniente entre asegurado y aseguradora.
Estos son acudir a la Super Intendencia de Bancos (SIB) o a un juzgado de carácter ordinario. La primera por ser un ente regulador de bancos y aseguradoras en Guatemala y la segunda cuando se busca una compensación por parte de los asegurados.
En este último punto, Leal destaca que falsear u omitir información podría constituirse en un delito. Por lo que es aquí que las aseguradoras terminan por no pagar, respaldados por información obtenida en investigaciones y no precisamente por parte de quien adquirió el servicio.
También hay casos en los que el asegurado inconforme, utiliza las redes sociales acusando de incumplimiento a las aseguradoras, pero si la omisión de datos de la persona originó el problema, la vitalización del caso podría tener implicaciones legales y entre estos destaca el pánico financiero, el cual es un delito penado por la ley.