Un grupo de trabajadores de Salud, acompañados de personal municipal y elementos de seguridad, se presentó este jueves en la terminal Minerva, en la zona 3 de Quetzaltenango, con el fin de realizar hisopados a los vendedores del lugar y detectar o descartar nuevos casos de Covid-19.
Sin embargo, la jornada no tuvo un resultado favorable, pues la mayoría de comerciantes rechazó someterse a la prueba, optó por guardar sus productos y retirarse.
El director de Abastos del lugar, Diego Álvarez, lamentó la actitud de los vendedores e hizo ver que la actividad se programó debido a que se ha conocido de locatarios que han contraído el virus y no lo han reportado al centro de Salud.
Según dijo, estas personas han decidido recuperarse en su casa y se constituyen en un subregistro de los casos detectados en aquel municipio.
Fueron pocos los comerciantes que aceptaron realizarse el hisopado, se dio a conocer.
Fueron menos de 15 los comerciantes que aceptaron realizarse la prueba, según las autoridades.