A través de las redes sociales circuló un mensaje en el cual informaban sobre la suspensión del servicio de transporte público en San José Pinula, al sur del departamento de Guatemala.
En el mensaje se puede leer que “debido a la presión recibida por medio de grupos que se dedican al cobro de la extorsión, el servicio de buses será suspendido a partir del jueves 29 de octubre, esto para resguardar la vida de los usuarios y colaboradores”.
Un equipo de TN23 se trasladó ese municipio para indagar sobre el caso. Se determinó que los pilotos sí reactivaron el servicio el 21 de septiembre, tras varios meses de suspensión por la emergencia del Covid-19, pero en las últimas horas se vieron obligados a suspenderlo nuevamente.
Según la información proporcionada en el lugar, los transportistas son víctimas de extorsionistas. Se denunció que se les exige semanalmente cierta cuota.
Solo en esa ruta, de San José Pinula a la capital, trabajan alrededor de 80 unidades del transporte colectivo.
Propietarios y conductores de los buses dieron a conocer que semanalmente deben pagar una cuota de Q12 mil, ahora les están exigiendo Q30 mil, lo cual dicen les es imposible, máximo que debido a la alerta únicamente pueden transportar el 50 por ciento de la unidad.
Si salen a las calles a laborar y no han pagado la cuota, corren el riesgo de sufrir un atentado por parte de estos grupos criminales.
Se conoce que son cuatro grupos a los que deben pagar para evitar ataques armados en su contra, sin embargo, extraoficialmente se sabe de un quinto grupo que ha iniciado a pedir una nueva cuota de extorsión.
Los más afectados son los pilotos que no pueden laborar, por ende no llevan el pan diario para su familia, y los usuarios que deben pagar más en otros medios de transporte por ser trasladados a sus destinos.