Si algo caracteriza a los guatemaltecos a nivel mundial es su capacidad de resiliencia ante las adversidades. Y es que no importa las condiciones, siempre se buscará salir a flote.
Es el caso de muchas personas que pese a las circunstancias laborales y económicas, buscan alternativas que les permitan generar un ingreso. Ya sea poniendo una venta de comida en sus hogares o hasta montar una pequeña empresa de mensajería.
Sin embargo la pandemia con sus múltiples impactos colaterales, ha afectado de manera directa a 7 de cada 10 emprendores en el país.
Guatemala con espíritu emprendedor
De 50 países evaluados, Guatemala ocupa la cuarta posición, por mostrar un alto potencial en la apertura de algún tipo de emprendimiento. Esto significa que 2.7 millones de guatemaltecos generan ingresos emprendiendo un negocio.
Predomina la informalidad
El estudio también muestra que 6 de cada 10 negocios no se formaliza, pues consideran que no hay beneficio al hacerlo, es decir hay un alto costo en el proceso o bien no sabe como hacerlo.
Es de señalar que el 71% de los clientes de los emprendedores se ubica en su comunidad, pueblo o aldea.
El monstruo de la inseguridad
El predominante factor de la inseguridad sigue afectando a los emprendedores, ya que un 34 por ciento de las personas consultadas, reportó haber sido víctima de algún tipo de delito.
Llegada de la pandemia
Luego que el COVID-19 llegara al país y se declara pandemia mundial, esto vino afectar a los pequeños negocios. 7 de cada 10 guatemaltecos vieron reducidos sus ingresos durante esta crisis.
Mientras tanto el 37% de las personas que recibía remesas dejaron de hacerlo. Asimismo, el 55% de los entrevistados dicen conocer a más de 5 personas que cerraron sus negocios.
Otro dato que resalta es que 7 de cada 10 entrevistados considera que ahora es más difícil iniciar un negocio.
Con información de Daniel Collin