El presidente estadounidense, Joe Biden encargó este miércoles a su vicepresidenta, Kamala Harris, hacerse cargo de la crisis humanitaria que ha generado la llegada de inmigrantes a la frontera sur del país.
Desde la llegada de Biden a la Casa Blanca se ha registrado un incremento en la llegada migrantes, particularmente de niños y adolescentes, que están siendo recluidos en centros de detención para inmigrantes.
El antecesor de Biden, Donald Trump, fue duramente criticado por el trato que su gobierno dio a los menores migrantes que llegaban por la frontera sur, en especial por su política de separarlos de sus padres.
Desde enero, el gobierno de Biden revirtió la política de Trump de devolver en la frontera a los menores no acompañados y, en lugar de ello, ha optado por procesar su ingreso y buscarles un lugar con familias que los patrocinen en el país.
Pero los críticos de Biden dicen que así ha provocado un aumento de la migración ilegal.
En febrero, los funcionarios de aduanas de Estados Unidos detuvieron a más de 100 mil personas a lo largo de la frontera sur, un aumento del 28% con respecto al mes anterior.
Al anunciar el nombramiento de Harris como su encargada de inmigración, Biden dijo a los periodistas y funcionarios de la Casa Blanca:
Ella es la persona más calificada para hacerlo, para liderar nuestros esfuerzos con México y el Triángulo Norte (Honduras, Guatemala y El Salvador), y los países que van a necesitar ayuda para frenar el movimiento de tanta gente, frenar la migración a nuestra frontera sur. Indicó