El Observatorio en Salud Sexual y Reproductiva (OSAR) comparten los registros de nacimiento que brindó el Registro Nacional de las Personas (RENAP) de niñas y adolescentes de entre 10 y 19 años de edad, durante el período de tiempo del 1 de enero al 30 de marzo del presente año.
Se tiene un sub registro que las niñas y adolescentes no están llegando al RENAP a registrar a sus bebes, hablamos de un sub registro es de un 20 o 30 por ciento. Los datos que tenemos dan cuenta que hemos tenido 18 mil 821 inscripciones del 1 de enero al 30 de marzo, del presente año.
De esas inscripciones hay 487 registros de nacimientos que pertenecen a niñas de entre 10 a 14 años, dijo Mirna Montenegro de OSAR.
La entrevistada detalló que ha habido 487 niños o niñas que han sido producto del delito de violencia sexual.
Si las desglosamos por edades podemos informar que hay una niña de 10 años. Cuatro niñas de 11 años. Hay 16 niñas de doce. Se encuentran 93 niñas de 13. Por ultimo hay 473 niñas de 14 años. Indicó
Al evaluar la información por departamentos se pude decir que son: Alta Verapaz, Bajo Verapaz, Huehuetenango, San Marcos, Quiché Escuintla, Jutiapa, que son los lugares donde hay más violencia sexual y embarazos en niñas.
Los agresores
Los estudios que se han hecho y que llevamos de los casos, indican que el 90 por ciento, de los agresores sexuales son cercanos a la niña, familiares o vecinos.
Hemos visto padrastros, abuelos, tíos y primos entre otros. Pareciera que una vez una niña es víctima de violencia sexual, eso como que le da derecho a los varones de su familia, también abusar de ella, o generar este tipo de violencia sexual”, Agregó Montenegro
La representante de OSAR externó que en un 30 por ciento los casos, el agresor sexual es el padre biológico de la víctima, quienes se sienten con el derecho de abusar sexualmente de sus propias hijas.
Mirna Montenegro destaca que en el marco del sistema patriarcal, la poca valoración que se hace hacia las niñas y mujeres, les hace pensar a los hombres que sus hijas son de su propiedad, como si se tratara de un objeto y pueden hacer con ella lo que consideren conveniente.
La violencia sexual continúa siendo un delito del ámbito privado, es decir dentro del seno del hogar. Sí los familiares se enteran no lo dicen, tratan de “resolverlo” a nivel doméstico.
Por ello es importante la prevención por medio de vecinos, familiares, iglesia, organizaciones de la comunidad. Al momento de darse cuenta que está sucediendo un delito de violencia sexual, o al sospecharlo debe ponerse la denuncia para proteger a las niñas.
¡Alarmante! Inacif reporta más de 10 evaluaciones por violencia sexual a niños y adolescentes