La Policía Nacional Civil (PNC) estableció operativos de control e interpuso denuncias ante el Ministerio Público (MP), tras darse a conocer la agresión en contra de uniformados en Huehuetenango.
El subdirector de operaciones de la institución policial, Nestor Diéguez, reaccionó al video donde se observa a agentes de la PNC siendo agredidos por un grupo de presuntos coyotes en el área denominada El Cruce, ubicado en San Mateo Ixtatán, Huehuetenango.
Se han tomado acciones para retomar el área y control, en ese sector de Huehuetenango. Estamos trabajando con personal, donde estamos realizando operativos, para poder identificar también quienes fueron las personas que cometieron estas agresiones en contra de nuestro personal policial.
Ya el proceso de investigación criminal se está realizando también y, se han interpuesto las denuncias en las instancia correspondiente, en el Ministerio Público”. Explicó Diéguez, subdirector de operaciones de la PNC.
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Sin embargo existe una interrogante por parte de la población tras observar el video ¿por qué los agentes no se defendieron? y al realizar la pregunta al funcionario, esto contestó:
Hay situación con bases a los decálogos de la utilización de las armas de fuego, también de las acciones que uno debe tomar. Considero también que es parte de una situación propia o personal, que se toma en un determinado momento. Vemos esta acción de nuestro personal que en todo momento trató de prevenir y de no llegar a consecuencias posteriores también con agresión con proyectil de arma de fuego. Agregó el subdirector de operaciones
Referente al estado de salud de los agentes, Nestor Dieguéz dio a conocer que fueron atendidos por personal médico y se encuentran estables, además señalo que el caso ya está bajo un proceso de investigación por parte del del Ministerio Público.
Los agresores que se observan en el video, son supuestos integrantes de un grupo denominado “Los Polleros” que opera traficando personas en el área, bajo la premisa de guiarlos de forma “seguro” por puntos ciegos hacía Estados Unidos.
Al consultar analistas en seguridad destacan que aunque los uniformados agredidos han sido calificados de “tontos” por no defenderse pese a contar con armas fuego, son todo lo contrario porque se apegaron a sus entrenamientos e instrucciones recibidas y sobre todo implementaron en todo momento el uso de la inteligencia emocional, que aun siendo agredidos físicamente no actuaron hepáticamente.
Agregan que el papel de la policía en sus comunidades es servir al bien público y la utilización de sus armas debe ser acorde con este rol.
Las normas internacionales son claras, las armas de fuego deben ser la excepción en el mantenimiento del orden y no la regla. Sólo deben ser utilizadas cuando resulte estrictamente necesario para proteger la vida. La facultad de llevar armas de fuego conlleva una enorme responsabilidad en asegurar que sean utilizadas de manera legítima.
El Código Penal de Guatemala establece que al momento de que un agente policial hiera o le quite la vida algún sospechoso, serán conducidos ante juez competente para enfrentar un proceso penal y los encargados de hacerlo serían sus propios compañeros según la interpretación actual de la ley.