Más de 7 mil migrantes se encuentran varados en la frontera Sur de Estados Unidos, a inmediaciones del Puente Internacional en Del Río, Texas.
En su mayoría son ciudadanos de Haití, Venezuela, Honduras, El Salvador y Guatemala, entre otras nacionalidades.
A diferencia de otras ocasiones en el que se anunciaba la caravana de migrantes, esta vez optaron por hacerlo de manera sigilosa y dividir la misma, para no llamar la atención de autoridades ni medios de comunicación.
Sin embargo la llegada de decenas de migrantes que terminaron por sumar millares, hizo colapsar la seguridad de elementos de la patrulla fronteriza en la referida área, por lo que se ha dado a conocer que ha sido necesario el apoyo del departamento de Seguridad Nacional y del Ejército de los Estados Unidos.
También se indicó que pese a la gran cantidad de migrantes, estos continúan llegando en grupos de alrededor de 40 personas.
Las personas se han aglomerado en el lugar, en su mayoría sin mascarilla ni implementación de medidas básicas de higiene y bioseguridad. Entre la multitud se observa una gran cantidad de niños y adolescentes, así como familias enteras.
Organizaciones en pro de los migrantes ya habían advertido en días anteriores sobre esta caravana, principalmente con migrantes de Haití y Venezuela que ante las crisis políticas y sociales de sus países y el ofrecimiento de TPS por parte de Estados Unidos, se han visto alentados a buscar un mejor futuro en el país del norte.
En el caso de los connacionales, hondureños y salvadoreños, estos se ven obligados a migrar, debido condiciones de pobreza e inseguridad que se generan en cada uno de sus países, los cuales son fuertemente azotados por condiciones climáticas que terminan por agravar la situación, sumado al tema de pandemia y sus efectos colaterales.
Con información de periodista Daniel Collin
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