En un paso peatonal ubicado frente al Cementerio General de la zona 3 capitalina, don Flavio y su familia ofrecen a los guatemaltecos, los tradicionales barriletes que marcan la celebración del Día de Los Santos en el país.
Colores vivos y una serie de figuras llaman la atención de las personas que acuden para preguntar y en otros casos, para adquirir uno o más barriletes. Los precios van de Q5.00 hasta Q100.00, todo depende del tamaño indica don Flavio con una sonrisa, mientras sigue concentrado en su trabajo.
A las personas les gusta más comprar barriletes de cajita, así como los tradicionales para divertirse en familia, continúa; mientras invita a los guatemaltecos a buscarlos entre las 8:00 y 17:00 horas.
Viajan desde Yepocapa
La familia de la que hablamos, es originaria de Yepocapa, pero decidieron traer a la capital su talento y buscar una oportunidad para generar ingresos, ya que como muchos guatemaltecos, fueron afectados en su economía por la pandemia del Covid-19.
Cuentan que la elaboración de barriletes es una tradición que se remonta a muchos años, ya que don Flavio heredó este arte de su padre, quien le enseñó cuando apenas tenía 6 años de edad. Hoy es él quien le enseña a sus hijos y nietos pequeños para que esto continúe en las siguientes generaciones.
Esta familia invita a las personas a no olvidar la tradición del vuelo de barriletes, para que nunca se pierda.
Porqué se vuelan barriletes en Guatemala
De acuerdo con la tradición oral del país, los barriletes sirven para comunicarse con las almas de los difuntos, por ello es que se acostumbra la elaboración de barriletes gigantes durante la conmemoración del Día de Los Santos y fieles difuntos; el 1 y 2 de noviembre.
El máximo exponente de esta tradición es Sumpango, un municipio de Sacatepéquez de donde surgió la leyenda de los barriletes, que se conoce hoy. Ésta cuenta que durante esa festividad, los malos espíritus salían para ocasionar molestias a las buenas ánimas, que se cree que en ese día tenían permiso del Ser Supremo para visitar su lugar de origen.
Pero por medio de los barriletes se ahuyentaba la maldad y se creaba un lazo de comunicación entre las almas y sus seres queridos; además se indica que por medio de la cola de los barriletes se les escribían mensajes que al momento de alzar el vuelo eran elevados hasta el cielo y entregados a sus seres queridos.