La variedad de alimentos que comemos, el aire que respiramos, el agua que bebemos y el clima que hace posible nuestra vida en el planeta, no existirían sin los recursos que la naturaleza nos provee a través de la diversidad biológica. Sin embargo, nos hemos preguntado, ¿hasta cuánto y cuándo nos alcanzará el medio que tenemos, hace no más de una semana circulaba un video en el que se observa la cantidad de basura que llega hasta el Río Motagua, un afluente importante para el país.
Y los ecosistemas, conformados por sistema de ríos, cadenas volcánicas, sierras, flora y fauna y demás elementos, están ante la amenaza de la deforestación, por mencionar apenas unos problemas. Por esa razón, este 5 de junio puede ser un buen momento para apoyar las acciones para el cuidado del medio ambiente.
5 de Junio, Día Mundial del Medio Ambiente
La salud del planeta sigue deteriorándose a pasos agigantados con más 3000 millones de personas afectadas por la degradación de los ecosistemas, con elevadas tasas de contaminación que causan unos nueve millones de muertes prematuras cada año y más de un millón de especies de plantas y animales están en peligro de extinción, expresó el Secretario de la Organización de Naciones Unidas -ONU-, con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente.
Cerca de la mitad de la humanidad ya vive en zonas de peligro climático, por lo que tiene 15 veces más probabilidades de morir a raíz de efectos del clima como el calor extremo, las inundaciones o la sequía”, António Guterres.
Guatemala, un país megadiverso
Para el Instituto de Investigación en Ciencias Naturales y Tecnología-IARNA- En diciembre de 2010 Guatemala fue reconocido como país megadiverso durante el décimo encuentro de la Conferencia de las Partes del Convenio sobre Diversidad Biológica (CoP 10). Significa que Guatemala es uno de los 20 países que está considerado como megadiverso.
Solo tenemos un planeta
La ONU indicó que el tema elegido este año para la celebración del Día Mundial, “Una sola Tierra”, nos recuerda que el planeta es nuestro único hogar y que hemos de proteger “la salud de su atmósfera, la riqueza y la diversidad de la vida en la Tierra, sus ecosistemas y sus recursos,” todos ellos bienes finitos.
“Pero no lo estamos haciendo. Le pedimos demasiado a nuestro planeta para mantener unas formas de vida que son insostenibles. Los sistemas naturales de la Tierra no pueden seguirle el ritmo a nuestras exigencias”, alertó.