El hombre, quien no ha sido identificado, fue baleado después de que levantó su arma en dirección a un policía dijo el teniente Nathan Dennis, portavoz de la agencia.
Según funcionarios, el hombre portaba chaleco blindado y fue perseguido hasta una autopista. Posteriormente tuvo que abandonar su vehículo en un camino rural rodeado por bosques y campos de cultivo a poca distancia de la carretera I-71, unos 72 kilómetros (45 millas) al noreste de Cincinnati.
La confrontación se produjo en un contexto en el que aumentaron las amenazas contra agentes federales luego del allanamiento a la finca del expresidente Donald Trump en Florida a principios de esta semana.
Funcionarios federales señalaron que el hombre “intentó irrumpir” en la zona de revisión de visitantes de la oficina del FBI, y huyó cuando fue confrontado por los agentes. Después de escapar hacia la interestatal 71, un patrullero lo vio, y el sospechoso le disparó a mientras éste era perseguido, informó Dennis.
El sospechoso salió de la interestatal al norte de Cincinnati y abandonó su vehículo en caminos rurales, donde intercambió disparos con la policía. El hombre sufrió “heridas desconocidas” pero nadie más resultó lesionado, informó la agencia.
Trabajadores estatales de caminos bloquean la circulación cerca del lugar mientras un helicóptero sobrevolaba la zona. Los agentes aparecieron un perímetro de 1,6 kilómetros (1 milla) cerca de la interestatal y pidieron a los residentes y comerciantes que cerraran sus puertas y permanecieran en interiores. La interestatal ya fue reabierta.
Las amenazas contra los agentes y oficinas del FBI en todo el país han ido en aumento desde que los agentes federales ejecutan una orden de cateo en Mar-a-Lago. En Gab, una plataforma de redes sociales populares entre supremacistas blancos y antisemitas, los usuarios han anunciado que se alistan para una revolución armada.
Las autoridades federales también han estado dando seguimiento a otras publicaciones preocupantes en Gab y otras plataformas en las que se amenazan con actos violentos contra agentes federales. El director del FBI, Christopher Wray, criticó estas amenazas durante su visita a una oficina del FBI en Nebraska el miércoles.
“La violencia contra los agentes del orden no es la respuesta, sin importar con quiénes están enojados”, dijo Wray el miércoles en Omaha.
El miércoles, el FBI también tuvo a sus agentes evitar a manifestantes y aseguró de que sus tarjetas de seguridad “no sean visibles fuera de los espacios del FBI”, debido al incremento en las amenazas en redes sociales contra el personal y las instalaciones de la agencia. Además solicitó a sus agentes estar atentos a su entorno y alertas a posibles manifestantes.
La recomendación no menciona en específico el allanamiento de esta semana en Mar-a-Lago, pero atribuyó las amenazas a “recientes reportes de medios sobre las actividades de investigación del FBI”.