Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) llevan meses dando esa recomendación ante la propagación de la viruela símica en Estados Unidos. Pero ha cobrado nueva importancia tras la publicación de un informe la semana pasada en la revista médica Lancet sobre un galgo italiano que contrajo el virus en Francia.
El perro pertenece a una pareja que dijo haber dormido junto al animal. Los dos hombres se infectaron de viruela símica tras mantener relaciones sexuales con otras parejas y aparecieron lesiones y otros síntomas. El galgo lesionado posteriormente y se le diagnosticó el virus.
Se han detectado infecciones de viruela símica en roedores y otros animales silvestres, que pueden transmitir el virus a los humanos. Sin embargo, los autores consideran que se trata del primer caso de infección de viruela símica en un animal doméstico, como un perro o un gato.
Los CDC recomiendan que los animales domésticos entren en contacto estrecho con una persona sintomática se mantengan en casa y alejados de otros animales y personas los 21 días siguientes al último contacto.