El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, afirmó este jueves que el obispo Rolando Álvarez, detenido desde agosto por conspiración, rechazó marcharse a Estados Unidos.
Esto luego de la liberación de un grupo de más de 200 opositores excarcelados y expulsados del país.
El obispo “estaba en la fila [para abordar el avión] y empieza a decir que él no se va”, por lo que fue enviado de vuelta a la cárcel en Managua, indicó Ortega en un mensaje por cadena de radio y televisión.
Álvarez no quiso acatar lo que manda la ley, lo que manda el Estado de Nicaragua”, agregó el gobernande sobre la decisión del obispo de rechazar la orden de expulsión del país.
Ortega
En conferencia de prensa, el presidente de Nicaragua habló sobre la liberación de presos políticos y anunció que envió a la cárcel a un obispo que se rehusó a exiliarse en EEUU.
Descartó que la liberación de 222 presos políticos en el país, fuese parte de un acuerdo político con Estados Unidos a cambio de que se le levantaran las sanciones impuestas contra de su administración.
Ortega indicó que la liberación de los opositores “es un mensaje”, según él, “de dignidad para preservar la paz”.