Sus allegados explicaron en conferencia de prensa que los procesos contra el empresario están viciados y consideran injusto que continúe en prisión, cuando un tribunal consideró en su momento que no existe peligro de fuga ni obstaculización de la justicia y que por ello le otorgó una medida sustitutiva.
La razón por la que Max Quirín no ha podido salir de la cárcel se debe a que la resolución del tribunal, respecto a esa medida sustitutiva, no ha quedado en firme.
LOS HECHOS
Quirín representó al sector empresarial ante la Junta Directiva del Instituto Guatemalteco de Seguridad (IGSS). En 2018 fue condenado por fraude a 6 años y 3 meses de prisión; según la fiscalía, el empresario avaló el contrato con la farmacéutica Pisa, S.A., empresa que fue responsabilizada por la muerte de más de 50 personas que padecían problemas renales.
El empresario también está señalado en otro proceso por presuntas anomalías en el alquiler de un edificio en Chiquimula para el IGSS.
Los familiares, amigos y empresarios insistieron que los procesos están viciados porque Max Quirín lleva más de 3 años en prisión preventiva y los casos se han atrasado por cuestiones administrativas de los juzgados. El próximo viernes se celebrará una audiencia donde el juez resolverá si le concede libertad condicional.
En un comunicado, los allegados también resaltaron que Quirín
Es un emprendedor esforzado, valiente y correcto, que ha invertido gran parte de su vida en el servicio a la nación, haciendo frente a los momentos difíciles que ha atravesado Guatemala, para ayudar al que está en necesidad.
