Uno de los geriátricos informó siete casos positivos de COVID-19, una muerte y dos casos pendientes de resultado. No precisó la identidad del fallecido.
Personal médico se presentó en el lugar y procedió a trasladar a los internados luego de que sus familiares se congregaron frente al establecimiento.
“Aislamos a ocho personas de las cuales siete son positivas. Brindamos viandas y la desinfección del lugar”, dijo a medios de prensa Eduardo Pérez, coordinador médico del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados.
Pérez denunció que “las condiciones de seguridad en este geriátrico no están garantizadas, como tampoco el seguimiento de los profesionales médicos” y añadió que se trasladará a los más de 40 adultos mayores que permanecen en el lugar.
Allegados de los residentes dijeron a medios de prensa que habían pasado los últimos cinco días sin tener respuestas de las autoridades del centro sobre el estado de los residentes y que éstos habían sido aislados en las habitaciones.
Aparentemente el paciente cero fue un auxiliar de enfermería que ocultó sus síntomas.
En tanto, la fiscalía de la ciudad de Buenos Aires investiga una posible falla en la prevención del contagio del nuevo coronavirus en otro asilo que debió ser evacuado la víspera luego de que se determinara que cerca de una veintena de ancianos y empleados estaban infectados.
La justicia busca determinar si los responsables del geriátrico incurrieron en el delito de “abandono de persona” y supuestas irregularidades en la atención de los hospedados y si los funcionarios del gobierno capitalino intervinieron “como corresponde” para atender los casos sospechosos, dijo el miércoles a medios de prensa el fiscal general de la ciudad, Juan Bautista Mahiques.
Un total de 16 adultos mayores y tres empleados de la institución ubicada en el barrio de Belgrano dieron positivo a COVID-19. Varios ancianos debieron ser hospitalizados.
El gobierno de Buenos Aires señaló en un comunicado que procedió a evacuar el geriátrico debido a que los dueños del establecimiento “no informaron ni colaboraran con la crítica situación de los internados”.
Las autoridades médicas del establecimiento argumentaron que desde que los primeros casos positivos se registraron el viernes, el servicio de atención telefónica de la ciudad les pidió derivar a los ancianos a las empresas del sistema privado de salud de las que eran socios y que algunas de éstas no prestaron ayuda.
Sin embargo, los familiares denunciaron que el establecimiento se fue quedando sin personal con el correr de los días y que tan sólo dos empleados, uno de ellos un electricista, quedaron a cargo de los ancianos.
Finalmente el Sistema de Atención Médica de Emergencias público de la capital se encargó la noche del martes de evacuar el lugar y derivar a la mayor parte de los contagiados.
En Argentina hay 2,992 infectados y 152 fallecidos. La mayor parte de los contagiados están en la provincia de Buenos Aires y la capital.
Estos son los primeros casos públicos de brotes del nuevo coronavirus en asilos de ancianos en el país.