El condado de Los Ángeles apelará la orden de un juez federal que requiere que la municipalidad y el condado alberguen a todos los indigentes del área de Skid Row en un plazo de 180 días y realicen una auditoría de todos los gastos relacionados con la crisis de personas sin hogar.
El condado presentó el miércoles un aviso de sus intenciones de apelar y pedirá que se suspenda la orden del juez, dijo el abogado Skip Miller, que representa el condado, en una declaración.
“Decidir cómo se gasta el dinero de los contribuyentes y se proveen servicios a las personas sin hogar es una función legislativa, no judicial”, dijo Miller.
La orden fue emitida el martes por el juez David O. Carter, que preside el caso de una demanda presentada por un grupo de dueños de negocios, vecinos y líderes comunitarios. La demanda acusa a la municipalidad y el condado de no responder de forma integral al problema de la indigencia.
En la víspera, el alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, prometió gastar casi 1.000 millones de dólares para sacar a los indigentes de las calles.
Carter ordenó que los 1.000 millones sean colocados en fideicomiso, con un plan de gastos “explicado y reportado a la corte en siete días”.