Meses después de que el gobierno de Donald Trump anunció el fin de la separación generalizada de niños inmigrantes de sus padres, esta política se sigue discutiendo acaloradamente en las cortes, donde los defensores de los migrantes aseguran que continúa la separación innecesaria de las familias.
De acuerdo con un informe del Proyecto Derechos Civiles en Texas, hubo 272 separaciones en un solo tribunal en Texas desde junio, cuando un decreto del presidente Donald Trump ordenó el fin de las separaciones de familias, que habían provocado indignación generalizada.
La gran mayoría de los casos afectan a niños que cruzan la frontera desde México con familiares que no son sus padres, tales como abuelos, tíos y hermanos adultos.
En 38 de los casos se trataba de un padre o guardián legal, la mayoría de los cuales tenían antecedentes penales, según el grupo.
El gobierno y la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU por sus siglas en inglés) están enfrentados en las cortes acerca los quizá miles de niños que fueron separados de sus familias antes de junio, cuando una orden judicial ordenó la rápida reunificación de las familias.
El gobierno ha reconocido que separó a más de 2.700 niños de sus familias y volvió a reunir a la mayoría de ellos, pero el informe de un organismo de vigilancia el mes pasado halló que otros miles de niños fueron separados y liberados antes de esa orden.