Estados Unidos anunció el viernes nuevas sanciones contra la “máquina de guerra rusa”, afirmó un alto responsable de la Casa Blanca, en el marco de un esfuerzo concertado de los países del G7.
Todos los Estados miembros del G7, cuáles líderes están reunidos para una cumbre en Hiroshima (Japón), preparan nuevas medidas, y Estados Unidos contribuyen con un paquete “consecuente” de sanciones que “harán más difícil aún para Rusia alimentar su máquina de guerra”, afirmó la fuente.
Objetivo
Las medidas estadounidenses tienen por objetivo “restringir de manera importante el acceso de Rusia a los productos necesarios para sus capacidades de combate”, dijo el alto responsable estadounidense.
Estados Unidos prohibirá concretamente las exportaciones estadounidenses Rusia a 70 entidades en y otros países.
Se aplican además 300 sanciones contra objetivos diversos y variados, “personas, organizaciones, barcos y aviones”, en Europa, Oriente Medio y Asia.
Sanciones
Los países occidentales han aplicado una serie de sanciones sin precedentes contra Rusia desde la invasión de Ucrania en febrero de 2022, para afectar económicamente a ese país, al reducir los ingresos generados por los hidrocarburos y desorganizar su industria de defensa.
Su preocupación ahora es impedir que Rusia evite las sanciones, y las últimas medidas también estadounidenses tienen por objetivo reducir la posibilidad de que eso prevén.
Estados Unidos busca “influir en el sector financiero (ruso) y en la capacidad rusa de producción de energía a mediano y largo plazo”, dijo el alto responsable de la Casa Blanca.
Se trata también de “mantener la congelación de los activos soberanos” rusos.
Esta fuente estadounidense no quiso dar detalles sobre las sanciones que anunciarán también los otros países del G7, y aseguró que serán dichos en un comunicado de la cumbre dedicada a Ucrania.
Estados Unidos busca “ajustar aún más (sus) sanciones con las impuestas por la Unión Europea y el Reino Unido para garantizar que el G7 siga lo más coordinado posible”.