Por diario Sport
Lo que parecía una simple lesión traumática, se ha convertido en todo un misterio. Frenkie de Jong sufrió un esguince en el tobillo derecho el pasado 21 de abril en el clásico liguero disputado en el Santiago Bernabéu. Este miércoles 11 de septiembre se cumplen 143 días con el futbolista de baja y rodeado de interrogantes y retrasos en los plazos de su recuperación.
De hecho, el centrocampista fue convocado por Ronald Koeman para la Eurocopa 2024 con la selección de Países Bajos, confiando en que Frenkie llegaría a recibir el alta médica durante los partidos amistosos de preparación o, al menos, durante los primeros días de concentración con el torneo ya empezado.
“Ha jugado partidos importantes con el Barça cuando no estaba para jugar, sin ritmo de partidos, con pocos entrenamientos. Para la salud del jugador no ha sido bueno”, expresaba el seleccionador neerlandés, quejándose de la gestión del club azulgrana con su compatriota.
Dos meses después de caer lesionado, De Jong regresó de la concentración de su selección para continuar con su recuperación. Los días pasaban, llegaban las vacaciones y arrancó la pretemporada. Nuestro protagonista, todavía, al margen del equipo. Fue uno de los primeros futbolistas que conoció personalmente a Hansi Flick, durante su primer día en las instalaciones del Barça, mientras seguía con su recuperación en el gimnasio. Se hizo viral la cara de circunstancia del técnico germano al ver al futbolista.
Turno para las revisiones médicas y en el material audiovisual que difundió el FC Barcelona se apreciaba un tobillo claramente castigado. Unas imágenes que daban a entender que el estado físico del jugador era peor de lo que se preveía a esas alturas de recuperación. Las alarmas, en lugar de apaciguarse, se encendían con más fuerza.
Curso nuevo, misma ausencia
El Barça puso rumbo a los Estados Unidos para realizar la gira de pretemporada en la que disputó tres partidos amistosos, además del Trofeu Joan Gamper disputado en Montjuïc. En ninguno de ellos estuvo convocado De Jong. Sí estuvo presente en este último, frente al Mónaco, en lo que supuso también la presentación del equipo a la afición. El neerlandés, como tercer capitán, fue uno de los últimos en saltar al césped del Estadi Olímpic. El público es soberano y expresó su descontento con el jugador con algunos pitos.
La temporada ha dado comienzo y el Barça ha firmado un arranque liguero inmaculado: pleno de victorias y 12 puntos que permiten a los catalanes liderar la clasificación. Este domingo regresa la competición doméstica, tras el primer parón de selecciones, a partir de cuando Flick esperaba contar con De Jong. No podrá hacerlo. Así pues, entre club y país, el futbolista Jong se habrá perdido un total de 24 partidos (16 de ellos oficiales): catorce con el Barça y diez con Holanda.
El quirófano en el horizonte
La recomendación del club es clara: tratar su lesión pasando por el quirófano, pero De Jong es reacio ante este escenario. En este contexto, el líder de la oposición a la presidencia culé, Víctor Font, compareció este lunes en rueda de prensa y dio algunos detalles más sobre el estado del neerlandés.
Font confesó que coincidió con el jugador y que hablaron sobre sus problemas físicos y la solución a los mismos: “Me lo he encontrado de casualidad y me ha dicho que prefiere no operarse, que aunque desde el club se lo han propuesto, no le dan garantías de éxito”. Y ahí está la clave de la cuestión porque el Barça quiere que pase por el quirófano y considera que es la mejor solución. Sin embargo, Frenkie prefiere, sin estar al cien por cien seguro de que va a recuperarse del todo, optar por una solución conservadora.
Un contrato preocupante
A todo ello, debe añadir un contexto que no se puede obviar: De Jong es uno de los futbolistas con un sueldo más elevado de la plantilla blaugrana, entrando en el podio de los que más cobran. Su contrato finaliza el 30 de junio de 2026 y su nombre ha estado en la rampa de salida durante los últimos veranos. El centrocampista sigue sin dar respuesta a la propuesta de renovación del club, por lo que todo apunta a que estaría afrontando su último curso con opciones de dejar dinero en caja antes de una hipotética salida como agente libre en dos veranos.