El volcán de Pacaya continúa con la expulsión de ceniza y gases que se elevan hasta 3 mil metros sobre el nivel del mar, dispersándose en dirección sur y suroeste a distancias de más de 20 kilómetros.
De acuerdo al reporte de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), durante 57 días la actividad del coloso ha presentado un nivel alto.
El volcán de Pacaya ha provocado efectos como flujos de lava y caída de ceniza en comunidades aledañas. Además, el pasado 23 de marzo la ceniza cayó en la ciudad capital.
Acciones de las autoridades
Parte de las acciones emitidas por la Conred ha sido la constante actualización de la actividad del coloso a través de los diferentes boletines vulcanológicos diarios y especiales del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh).
La información es compartida con los pobladores y autoridades de las comunidades cercanas.
Por cada boletín vulcanológico especial del Insivumeh, la Conred realiza la emisión de avisos informativos dirigidos a las autoridades locales y población en general, en los cuales dan a conocer recomendaciones para la toma de decisiones.
Por su parte, el personal de la Unidad de Prevención de Volcanes (UPV) y delegados departamentales mantienen el monitoreo que es compartido con las autoridades y pobladores, brindando las recomendaciones para prevenir situaciones generadoras de riesgo, emergencia o desastre.
Flujos de lava
En las útlimas horas se reportó un flujo de lava del volcán de Pacaya que avanzaba y afectó una vivienda que funcionaba como área de monitoreo en una finca y los servicios sanitarios para las personas que visitaban el área.
Según la institución, la vivienda estaba deshabitada. El flujo de lava continúa avanzando entre 50 y 60 metros diarios. La comunidad próxima es El Patrocinio, que se localiza a 1,5 kilómetros de donde se encuentra actualmente el flujo de lava.
El pasado 30 de marzo los delegados de la Conred visitaron las áreas donde se desplaza el flujo volcánico para determinar, a través de la implementación de técnicas como el levantado de drones y otras, el trayecto del flujo de lava y determinar las acciones a emplear.
Las comunidades aledañas al volcán de Pacaya cuentan con sus planes de respuesta, que se actualizaron el año pasado. Y se han hecho simulacros y simulaciones con ellos como parte de la preparación.
Además, cuentan con sistemas de alerta para informar a los vecinos y han identificado el sonido de prevención y la alarma para evacuar. Todo esto se ha compartido en reuniones convocadas en las comunidades.
Agricultores afectados por daño en cultivos por caída la lava del volcán de Pacaya