Se espera que el expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, acuda el viernes a una audiencia virtual en un tribunal de Nueva York para enfrentar cargos de narcotráfico y armas después de ser extraditado el jueves.
Tan sólo tres meses después de dejar la presidencia, Hernández subió a un avión de camino a Nueva York escoltado por agentes de agencia antidrogas estadounidense, más conocida como DEA. La audiencia será virtual debido a protocolos por la pandemia del COVID-19.
Las autoridades de Estados Unidos dijeron el jueves que entre aproximadamente 2004 y 2022 Hernández participó en una “violenta” conspiración para permitir que carteles de la droga enviaran miles de kilos de cocaína a Estados Unidos a cambio de pagarle millones de dólares.
En una rueda de prensa en Washington, el fiscal general de Estados Unidos Merrick Garland dijo que Hernández “abusó” de su posición como presidente para dirigir Honduras como “un narco estado” y que recibió sobornos por parte de múltiples carteles, incluido, cuando era congresista, del Cartel de Sinaloa, operado en su momento por Joaquín “El Chapo” Guzmán.
“Debido a estos supuestos crímenes, comunidades en Estados Unidos sufrieron y el pueblo de Honduras sufrió”, dijo Garland.
Las autoridades estadounidenses hicieron públicos el jueves documentos que acusan a Hernández de tres cargos: conspirar para importar cocaína a Estados Unidos, usar armas y conspirar para usar armas y herramientas destructivas.