De acuerdo al tablero de situación de COVID-19, Guatemala está a 7 casos de alcanzar los 164 mil acumulados registrados en los diez meses de la llegada de la enfermedad al país.
La última actualización refleja 163 mil 993 hasta el lunes 8 de febrero con los últimos datos reportados por los laboratorios de salud.
De esa cuenta se tiene que de 6 mil 371 pruebas se confirmaron 746 nuevos casos del virus.
En el caso de los fallecidos, se reportan 33 casos registrados en la última actualización, ocurridos en fechas anteriores y cero para las últimas 24 horas.
Casos activos
Según la estadística, la cifra de activos a la fecha es de 7 mil 494 pacientes, en tanto que la de recuperados es de 150 mil 544.
Además se tiene el registro de 5 mil 955 personas que murieron como consecuencia de la enfermedad.
Incidencia, mortalidad y letalidad
Los indicadores muestran que en la actualidad, la incidencia acumulada es de 972.8 casos por 100 mil habitantes; en tanto que la tasa de mortalidad es de 35.3 fallecidos por cada 100 mil.
En el caso del porcentaje de letalidad, este se mantiene en 3.6%.
Incidencia por departamento
En el caso de los departamentos, Guatemala continúa con la mayor cantidad de casos con 84 mil 368 casos acumulados.
Después de Guatemala está Quetzaltenango con 10 mil 339 casos, sigue Sacatepéquez con 7 mil 374; San Marcos con 6 mil 147, e Izabal con 5 mil 192.
Género y edad
En cuanto a la incidencia en género y edad, las estadísticas muestran el mismo comportamiento debido a que la mayor cantidad de casos se diagnostica en hombres.
Según el tablero, del total de casos el 55% se contabiliza en hombres y el 44% en mujeres.
Respecto a la edad, el mayor número de casos está en personas comprendidas entre los 20 y los 39 años de edad.
Situación de la enfermedad
En este momento la incidencia de casos disminuyó en comparación con los primeros días de enero en que se reportaban cifras altas de positivos; por lo que se relajaron algunas restricciones en cuanto a horarios, sin embargo las autoridades mantienen la vigilancia epidemiológica de la enfermedad y las disposiciones continúan sujetas a cambios.
Para realizar actividades sociales, las personas deben aplicar las disposiciones de conformidad con el nivel de alerta en el que se encuentre su localidad.