Las personas con obesidad o sobrepeso tienen un 83 % más de probabilidades de padecer una enfermedad renal crónica en comparación con las que tiene un peso saludable.
Puede inducir a la diabetes e hipertensión debido a que genera cambios metabólicos y representan una gran carga para los riñones.
La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre sobre los vasos sanguíneos, el límite superior en el que se debe mantener es 120/80mm Hg; la presión alta daña los vasos sanguíneos de los riñones y estos dejarán de eliminar los desechos del cuerpo y también el exceso de líquido.
Renal
Cabe resaltar que, mantener un estilo de vida saludable evita la Litiasis Renal o cálculos renales, los cuáles son masas sólidas como pequeños cristales que se pueden formar en los riñones o uretra.
Entre los síntomas que se pueden presentar están: dolor intenso y sangre en la orina; sin embargo, en algunas personas no presenta síntomas.
Para evitar los cálculos renales es importante beber por lo menos 8 vasos de agua pura al día.
También las infecciones urinarias repetitivas pueden propiciar la Enfermedad Renal, estas se presentan cuando entran bacterias en la uretra, cambios en las bacterias de la vagina, mala higiene o actividad sexual.
Los síntomas más frecuentes son dolor en la parte baja del abdomen, orinar con frecuencia y sangre en la orina. En las mujeres suele ser más común ya que la uretra es más corta y facilita el ingreso de bacterias.