En el juzgado B de mayor riesgo se analizó y resolvió que evidencias serán diligenciadas en el juicio que enfrentaran unos auxiliares fiscales de Chiquimula. Según la investigación de la fiscalía de asuntos internos, los sindicados son acusados de pedir de 3 a 10 mil quetzales para cerrar unas investigaciones por asesinatos.
En diciembre del 2019 se resolvió que los 5 acusados enfrenten un juicio por encubrimiento propio y cohecho pasivo. El juez del proceso Miguel Ángel Gálvez, aceptó las evidencias propuestas por el fiscal del caso.
A criterio de la fiscalía las exigencias de dinero quedaron evidenciadas en conversaciones telefónicas que sostuvieron los acusados, quienes hablaron el código para ocultar los actos en contra de ley.
El juzgador informó que serán los jueces del tribunal B de mayor riesgo, quienes juzguen y resuelvan si los 5 acusados son inocentes o culpables.