La Junta Monetaria decidió por unanimidad mantener la tasa de interés líder de política monetaria en 5%, como lo tenía previsto; con base en el análisis integral de la coyuntura económica externa e interna, y luego de evaluar el Balance de Riesgos de Inflación.
En el entorno externo, destaca que las proyecciones de la actividad económica mundial continúan evidenciando crecimientos positivos tanto para 2023 como para 2024, “aunque a un ritmo más moderado que el año previo, en un entorno de incertidumbre y riesgos a la baja, debido a condiciones financieras internacionales restrictivas y tensiones geopolíticas a nivel mundial”.
De esa cuenta indicó que la inflación a nivel internacional empezó a ceder, particularmente la de los principales socios comerciales del país, aunque todavía por encima de las metas de la mayoría de bancos centrales.
En el ámbito interno, la inflación a mayo de 2023 continuó reduciéndose, para ubicarse en 6.54% (una disminución de 3.38 puntos porcentuales desde su nivel más alto de 9.92% en febrero de 2023).
Lo cual señala que es el “resultado, principalmente, de los aumentos en la tasa de interés líder de política monetaria, de una menor presión inflacionaria externa y de la reducción de las expectativas de inflación”.
“Tanto los pronósticos como las expectativas sugieren que la inflación mantendría una trayectoria decreciente que convergería a la meta determinada por la Junta Monetaria 4.0%+/- 1 punto porcentual para fin de año”, señala la Junta.
Crecimiento económico del país
En cuanto al crecimiento económico para 2023 y 2024, la Junta Monetaria detalla que la mayor parte de los indicadores de actividad económica; IMAE, ingreso de divisas por remesas familiares y crédito bancario al sector privado; siguen con un comportamiento acorde a las proyecciones de crecimiento para ese período. El cual se fijó entre 2.5% y 4.5%.
La entidad se comprometió a continuar adoptando las medidas necesarias para que los niveles de inflación converjan gradualmente a la meta, esto a través del seguimiento cercano a la evolución de los principales indicadores económicos, tanto externos como internos, que puedan seguir afectando el nivel general de precios, y las expectativas de inflación.