De acuerdo con los resultados de las elecciones legislativas del domingo en la Unión Europea, la derecha tradicional logró imponerse, en medio de una ultra derecha que gana terreno y una izquierda en franco retroceso.
La ultraderecha en Francia, Austria y Alemania marcó la tendencia y amenaza con condicionar no solo las futuras políticas europeas, sino también cambiar algunos escenarios.
De hecho, los comicios provocaron un fuerte terremoto en Francia. El presidente Emmanuel Macron quedó contra las cuerdas con el contundente triunfo de la radical Agrupación Nacional (RN), empujado por el joven emergente de la ultraderecha local Jordan Bardella.
Cuya lista duplicó los votos de la fuerza oficialista, dejando en un lejano tercer lugar al Partido Socialista. En medio de fuertes presiones, Macron disolvió el Parlamento y llamó a elecciones anticipadas que se celebrarán entre el 30 de junio y el 7 de julio.
Porque avanza la ultra derecha
El avance de la derecha radical está sustentada por el creciente respaldo de los más jóvenes, quienes muestran descontentos con los partidos tradicionales.
En Francia la Agrupación Nacional (RN), que obtuvo alrededor del 30% de los votos, más del doble que el partido de Macron, segundo con el 15%. El desgastado Partido Socialista (PS) alcanzó un 14%.
En otros escenarios, como el de España, con Vox en un lejano tercer lugar, con poco más del 10% detrás del Partido Popular (PP/conservador) y el PSOE del presidente socialista Pedro Sánchez, según los primeros sondeos.
Sin embargo, obtuvo una importante victoria en Austria, donde el opositor y ultranacionalista FPÖ superó al gobernante partido democristiano ÖVP. También logró fuertes avances en Grecia, Países Bajos e Italia.