“Es como perder a un padre”. Los habitantes de San Petersburgo rindieron homenaje el jueves por la mañana a Yevgueni Prigozhin, jefe del grupo paramilitar Wagner convertido en enemigo del Kremlin, que supuestamente falleció en un accidente de avión.
A la sombra del edificio de cristal donde Wagner instaló su cuartel general en la antigua capital imperial rusa, sus partidarios desfilaron el jueves para colocar claveles rojos, rosas o insignias con la calavera del logo del grupo armado.
Huérfana
Aquí no se nombra su rebelión, ni el hecho de que Putin lo repudió, ni las posibles causas de la caída del avión en el que viajaba con sus colaboradores cercanos, entre ellos el jefe de operaciones de Wagner, Dmitri Utkin.
Pavel Zakharov, hombre de negocios que vino a presentar sus respetos, comparó al fallecido con el expresidente francés y líder de la Resistencia contra los nazis, Charles De Gaulle.
Trapo rojo
Con una calavera y una bandera rusa en su gorra, Igor, ingeniero de 42 años, también considera que quedó huérfano.
Natalia, una joven de 31 años, vino en bicicleta a dejar un ramo. Dijo que siente que ha perdido a alguien cercano.
Aunque Natalia no compartió su opinión sobre las causas del accidente aéreo, mientras se especula sobre la posibilidad de que fuese un asesinato, explicó que teme que la muerte de Prigozhin pueda desestabilizar Rusia y provocar malestar.