Gianluca Mancini, autor del gol que dio la victoria a la Roma contra la Lazio (1-0) en el derbi liguero del sábado 6 de abril de 2024, fue multado este martes 9 de abril de 2024, con 5 mil euros (5 mil 428 dólares) por ondear dos banderas contra la Lazio.
Una de ellas tenía los colores de la Lazio y una rata dibujada, mientras que en la otra se podía leer “Anti Lazio”.
Esas banderas pertenecían a los grupos de hinchas de uno de los fondos y fueron ondeadas por Mancini durante las celebraciones post-partido, después de que la Roma rompiera una sequía de dos años sin victorias sobre su vecino.
Por su parte, la Liga Italiana de Fútbol reclamó este martes la apertura de un expediente por insultos racistas proferidos desde la grada durante ese derbi.
Emiten comunicado
En un comunicado, la Serie A pidió a la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) que investigara los insultos recibidos por el atacante belga de la Roma Romelu Lukaku y por el mediocampista francés de la Lazio Matteo Guendouzi.
La Serie A denunció igualmente un caso de “discriminación religiosa” por parte de hinchas de la Lazio.
No dio más detalles, pero los hinchas de la Lazio tienen la costumbre de insultar a los de la Roma llamándoles “judíos” y un sector de los hinchas más radicales de la Lazio está asociado a grupúsculos fascistas, aunque en la hinchada de la Roma también hay grupos ligados a la extrema derecha.
En las gradas del Olímpico, el rumano Stefan Radu, exdefensa de la Lazio, generó polémica al llevar una sudadera donde se leía “SS Lazio”, pero con una grafía que hacía pensar que “SS” se asemejaba a la insigna nazi de las “Schutzstaffel” en vez de al nombre del club, “Società Sportiva”.
Disturbios
En las gradas del estadio no hubo disturbios violentos, pero unas horas antes del partido sí hubo peleas entre ultras de ambas formaciones.
Los insultos e incidentes racistas son un problema recurrente en el fútbol italiano, donde esta temporada ya se han producido diversos episodios.
En enero, por ejemplo, el arquero francés del AC Milan Mike Maignan escuchó gritos de mono dirigidos a él en el campo del Udinese y decidió abandonar temporalmente el terreno de juego, lo que obligó al árbitro a interrumpir de manera momentánea el partido, hasta que el jugador decidió regresar.
Con información de la agencia de noticias: AFP