Los expertos designados por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU reclamaron el miércoles una investigación de los ataques a los manifestantes.
Dijeron en un comunicado que les alarman los informes de numerosas muertes desde el 3 de junio, cuando las fuerzas de seguridad dispersaron violentamente a los manifestantes frente al cuartel militar en Jartum.
Los manifestantes exigían la entrega rápida del poder a un régimen civil, a lo cual se negaron los generales.
Tras la sangrienta represión, los opositores desistieron de una huelga general y un llamado a la desobediencia civil.
Desde entonces han reabierto los negocios y hay más tráfico en las calles de Jartum.