Después de mantener conversaciones con el enviado de Moscú menos de un mes antes de que expire el pacto, Stoltenberg dijo que “no vimos ninguna señal de que Rusia esté dispuesta a volver a cumplir” con el Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF) entre Estados Unidos y la Unión Soviética.
En febrero, Washington comenzó un proceso de seis meses para retirarse del pacto y culpó a Rusia de desarrollar un misil que no se apega a las condiciones del mismo. El tratado llegará a su fin al menos que Rusia destruya los misiles para el 2 de agosto.
El Pentágono dijo que el misil de crucero con base en tierra SSC-8 cae dentro de ese rango y podría permitir a Moscú lanzar un ataque nuclear contra Europa con poco o ningún aviso.