La Diocesis de Sololá-Chimaltenango manifestó su sentir luego de hechos violentos que se registraron el pasado sábado en la parroquia de San Pedro la Laguna.
Mediante un comunicado las autoridades eclesiásticas señalan que después de la misa de las 18:00 horas, un grupo de personas lideradas por Juan González Chavajay llegaron hasta la casa parroquial en donde golpearon puertas y llegaron “con alarde de fuerza” para agredir verbalmente a los dos sacerdotes recién llegados; así como a un grupo de feligreses que los acompañaban.
La Dicésis señala que se trata de un acto intimidatorio de ese grupo que continúa creando confrontación en el pueblo para atender intereses ajenos a la fe cristiana, por lo que exhortan a la población católica a no apoyarlos.
Sin Jesús Sacramentado
La Diócesis señala que esta situación impide el trabajo de servicio de cualquier sacerdote por lo que no es posible la presencia de Jesús Sacramentado “mientras haya peligro de profanación y no se garantice el respeto y seguridad a las personas.”
La Diócesis de Ssololá-Chimaltenango apoya a aquellos grupos parroquiales que desean trabajar según las leyes eclesiásticas para el bien del pueblo y en comunión con la legítima autoridad eclesiástica. Siguiendo la costumbre de la parroquia de San Pedro La Laguna, ningún grupo que no haya hecho profesión de fe y juramente de fidelidad debe ser reconocido ni asumir un cargo directivo”, señalan.
El problema ocurre desde hace varios meses en los que se ha dado un conflicto entre los feligreses de ese municipio.