El Presidente electo del país Bernardo Arévalo y la vicepresidenta electa Karin Herrera denunciaron un golpe de Estado en curso en el país; y enviaron un mensaje a los guatemaltecos a defender la democracia y la voluntad popular que se reflejó durante la segunda vuelta electoral del pasado 20 de agosto.
Arévalo indicó que el país está viendo un golpe de Estado en curso, en el que el aparato de justicia y otras instituciones están siendo utilizadas para romper el orden constitucional al negarse a aceptar los resultados y emprender acciones en contra de las autoridades electas; tratando de esa manera impedir la toma de posesión.
Lo cual se ve mediante coacciones a funcionarios, como al Tribunal Supremo Electoral (TSE) y citó como ejemplo a los magistrados de la institución, del registro de ciudadanos; lo cual se hace de manera vergonzosa, intimidando y amenazando.
“Existe un grupo de políticos y funcionarios corruptos que se niegan a aceptar los resultados y han puesto en marcha un plan para romper el orden constitucional y romper la democracia. Estas acciones constituyen un golpe de Estado que es promovido desde instituciones que deberían garantizar la justicia en el país, encabezadas por la Fiscal General Consuelo Porras, el fiscal Rafael Curruchiche y el juez séptimo de instancia penal Fredy Orellana así como la Junta Directiva del Congreso y otros actores corruptos y antidemocráticos”, indicó.
Llamado a la población
Ante estos acontecimientos Arévalo hizo un llamado puntual a los diferentes sectores del país para “destruir a las fuerzas golpistas”, que promueven estas acciones; e indicó que no están hablando como candidatos de Semilla, sino como autoridades electas.
“Como presidente electo de la República, hago un llamado a los pueblos de Guatemala, a la sociedad civil, a los empresarios, a los trabajadores y al movimiento popular, a las iglesias, y a las autoridades indígenas, a las fuerzas políticas legítimas y a los funcionarios honestos, a los estudiantes y la academia, a las autoridades electas, a las juventudes y a todos los que rechazamos la corrupción y el autoritarismo a unir fuerzas en defensa de la democracia y respeto irrestricto a la voluntad popular”.
El presidente electo enfatizó que el llamado que se hace es a la manifestación pacífica, sin violencia.
“Quiero hacer una aclaración nosotros enfatizamos que este derecho a la resistencia, que esta necesidad de movilización, que este deber cívico de actuar en la defensa de la democracia, debe ser ejercido de manera pacífica y negarse a caer en trampas para caer en la violencia”.
Transición y postura por declaración del Consejo Permanente de la OEA
Respecto al proceso de transición, el presidente electo dijo que ven formalidad protocolaria para que este inicie por parte del presidente Alejandro Giammattei, pero que al mismo tiempo ven todas esas acciones de instituciones que entorpecen el proceso; por lo que son dos cuestiones que están en completa contradicción.
En torno a lo que se acordó durante la sesión del Comité Permanente de la Organización de Estados Americanos, indicó que han constatado con satisfacción la postura de la comunidad internacional que está posicionada detrás de la defensa de la democracia de Guatemala.
Indicó que esperan que el proceso de transición no sólo comience bien y se lleve desde una perspectiva protocolar sino que además sea un efectivo proceso de transmisión del poder de autoridades electas democráticamente de Gobierno saliente a uno entrante en donde ninguna parte del Estado se confabule par violar la constitución y la voluntad del pueblo.
“A lo largo de los cuatro meses que faltan, pedimos que acompañen las acciones legales y políticas que estaremos tomando para evidenciar el rechazo nacional a esta élite corrupta que hoy está vulnerando la constitución y violando la voluntad del pueblo de Guatemala”.