El principal sospechoso en el proceso contra los nueve presuntos yihadistas acusados por los atentados perpetrados en Bruselas en 2016 aseguró este miércoles que “no estaba al tanto de nada” sobre los planes de ataque.
Salah Abdeslam, un francés de 33 años que ya fue condenado por su papel en los atentados perpetrados en París de noviembre de 2015, enfrentó en la jornada su primer día de interrogatorio en el juicio que se realiza en la capital belga.
Los hechos
El 22 de marzo de 2016 dos suicidas se inmolaron en el aeropuerto de la capital belga y un tercero hizo lo mismo en una céntrica estación del tren subterráneo, en atentados que provocaron la muerte de 32 personas e hirieron a más de una centena.
En su interrogatorio, Abdeslam aseguró que no tenía conocimiento de los planes sobre los atentados en Bruselas.
Mi presencia en el banquillo es injustificada”, protestó ante el tribunal. “Esto no es justicia. Esto es hacer un ejemplo de alguien”, insistió.
Abdeslam argumentó que no pudo haber participado en la planificación de los ataques de Bruselas porque, afirmó, esos atentados fueron planificados después de su detención, en marzo de 2016.
No estaba al tanto de nada”, dijo.
Juicio
El juicio contra los acusados por los atentados en Bruselas comenzó el 5 de diciembre pasado, en una sala de alta seguridad especialmente construida en la antigua sede de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Hombre sin defectos
Cuando la presidenta del tribunal, la jueza Laurence Massart, le pidió que describiera sus cualidades, Abdeslam dijo que siempre había “tratado de hacer el bien. Es lo que siempre he hecho a lo largo de mi vida”.
¿Y sus defectos?”, preguntó la jueza. Abdeslam hizo una pausa por un momento para reflexionar y luego respondió: “No conozco ninguno”.
Otro de los acusados, Mohamed Abrini, también trató de minimizar su papel, a pesar de ser el único miembro sobreviviente del equipo que ejecutó los ataques, de acuerdo con la fiscalía.
Hombre del sombrero
Abrini fue identificado por los fiscales como el llamado ‘hombre del sombrero’, que puede verse en imágenes de vigilancia en el aeropuerto, donde cambió de opinión a último minuto y decidió no hacer detonar la bomba que transportaba.
Abrini dijo a la corte que estaban “tratando de ponernos chaquetas que son demasiado grandes para nosotros. Al igual que en París, nos condenarán por lo que hicieron otros”.
Con una camiseta naranja con capucha debajo de una chaqueta oscura, con el pelo muy corto y una barba poblada, Abrini argumentó que los acusados procesados en Bélgica “no eran la punta de la pirámide”.
Nunca atraparon a los comandantes, pero tienen que darle una paliza a alguien, y ese alguien somos nosotros”, argumentó, antes de acusar a la fiscalía belga de complacer la sed de venganza del público.
La versión de los acusados sobre los hechos previos y el día de los ataques se examinará más adelante en el juicio, pero los interrogatorios de este miércoles se centraron en la motivación de los nueve acusados.