España ha contabilizado este miércoles 325 nuevos fallecidos por coronavirus. Aunque se trata de un ligero repunte con respecto a los 301 registrados este martes, exceptuando la jornada de ayer, es el mejor dato desde el pasado 21 de marzo.
Lo mismo sucede con los nuevos contagios, 2,144, que pese a superar ampliamente la cifra de las dos jornadas anteriores, con esa salvedad, es el mejor dato desde el 18 de marzo. A pesar de esa subida, los nuevos casos positivos se sitúan muy por detrás de las nuevas altas, pues los pacientes curados han alcanzado en las últimas 24 horas el récord desde que comenzó la epidemia, con 6,399 personas que han superado la enfermedad.
Por primera vez desde que comenzó la propagación de la epidemia en el país, los casos activos, 103,970, representan menos del 50 % del total de casos confirmados por PCR, que ascienden ya a 212,917, a los que habría que sumar los más de 20,000 casos detectados a través de análisis serológicos de personas que presentaban anticuerpos por haber pasado ya la infección.
Diferencias territoriales
Los datos difundidos hoy por el departamento de Sanidad, que recoge los que le son remitidas por las diferentes Comunidades Autónomas, arrojan una anomalía en el caso de Galicia. En este territorio de los 5,393 enfermos curados de covid-19, 3,552, es decir, el 65 %, habrían recibido el alta en la última jornada. La explicación podría deberse a un déficit en la notificación de los datos durante las últimas semanas.
Asimismo, llama la atención el caso de la Comunidad de Madrid, donde este miércoles el número de nuevos contagios (981), duplica al de nuevos curados (473), justo al contrario de la media del país, donde las recuperaciones triplican los nuevos casos positivos.
También destaca la coyuntura del País Vasco. Si en todo el Estado los casos activos ascienden al 62 % del total, en este territorio llegan al 93 %. Así, la región vasca computa 12.619 casos confirmados, 10.474 pacientes curados (83%) y 1,274 fallecidos (10 %).
Hacia una “nueva normalidad”
Este martes el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, presentó el plan para la desescalada de las restricciones para la lucha contra la epidemia del coronavirus en el país. Se trata de un plan, según sus palabras, “para la transición hacia una nueva normalidad”.
Así, en la reunión del Consejo de Ministros se ha aprobado un programa dividido en cuatro fases de al menos dos semanas de duración cada una, el periodo medio de incubación del virus, que no se llevará a cabo de manera homogénea en todo el país, sino que cada provincia tendrá su propio ritmo de avance atendiendo al cumplimiento de criterios que aún están por determinar por el Ministerio de Sanidad.
“Será una desescalada, por lo tanto, asimétrica, con distintas velocidades según el territorio”, sostuvo el presidente, que sí avanzó algunas concreciones.
El curso escolar se da por finalizado
Una de esas precisiones fue la referida al curso escolar. Sánchez adelantó que ya se da por terminado el presente ejercicio y que los alumnos de todos los niveles volverán a las clases presenciales ya en septiembre, con el inicio del nuevo curso.
Sin embargo, especificó que sí se abrirán algunos centros para los menores de seis años cuyos dos padres no puedan teletrabajar y no puedan ser atendidos por nadie.
Otra de las excepciones será la habilitación de clases voluntarias para los alumnos de cursos que otorguen título o den paso a un examen final o a un nivel educativo superior. Además, se permitirá la apertura de los centros de Educación Especial.