Las reservas comerciales de petróleo en Estados Unidos registraron una fuerte caída la semana pasada, muy por encima de lo esperado por los analistas, según los datos publicados por la Agencia Estadounidense de Información sobre Energía. En la última semana de agosto estas reservas perdieron 10.6 millones de barriles para ubicarse en 422.9 mb.
Los analistas esperaban una caída de 2.2 mb según el consenso reunido por Bloomberg. Luego de un aumento la semana pasada, las reservas de gasolina cayeron en 200.00 mucho menos que los 1.25 mb esperados.
La caída de reservas de crudo de la semana pasada es la continuación de la tendencia del mes, con unos 20 mb de crudo destinados a refinerías para convertirlos en gasolina o diésel para consumo, explicó Andy Lipow, de Lipow Oil Associates.
Las refinerías bajaron ligeramente la cadencia la semana pasada, a una tasa de utilización de sus capacidades de 93,3% frente a 94,5% la semana anterior.
La demanda aumentó a 21,42 mb diarios (mbd) frente a 21,16 mbd la semana anterior.
Los precios del crudo se mantenían ligeramente al alza, sobre todo tras el golpe de Estado en Gabón, un productor de petróleo. El mercado se mantiene atento al impacto del huracán Idalia en la costa oeste de la Florida.