Los pobladores del municipio de Santiago Sacatepéquez, Sacatepéquez, tendrán 180 días para despedirse de las bolsas plásticas, el duroport, las pajillas y sus derivados. Este período de tiempo se calculará a partir de la entrada en vigencia del Acuerdo 06-2019 del Concejo Municipal, que será ocho días después de la publicación realizada este jueves en el Diario Oficial. La medida fue tomada considerando los daños que este tipo de productos causan al medio ambiente.
“Los productos de plástico derivados del petróleo, tardan numerosos años en degradarse, muchas veces se desintegran y se transforman en partículas de micro plástico que terminan flotando en cursos de agua y el mar, lo que significa un peligro para el ser humano.” se lee en el documento.
En el caso del duroport, el acuerdo explica que se debe evitar el uso de productos como bandejas, vasos térmicos, empaques para alimentos y embalajes de objetos frágiles, los cuales “tardan aproximadamente 1,000 años en degradarse, declarado como virtualmente casi imposible de reciclar”, lo cual conlleva a que sean incinerados y vertidos en muchas ocasiones en cauces de ríos que desembocan en el mar.
Sanciones
En los artículos 2 y 3 del acuerdo, la comuna de Santiago Sacatepéquez establece que toda persona individual y jurídica que haga uso de “estos productos de único uso, inútiles y no reusables, pajillas, duroport y sus derivados, será sancionada con una multa de trescientos quetzales (Q300.00).
A las empresas que comercialicen y distribuyan estos productos dentro del municipio se le sancionará con una multa de un mil quetzales (Q1,000.00).
En el artículo 4 aclara que la reincidencia en el incumplimiento de la norma, en cualquiera de los casos anteriores, se sancionará con el doble del valor de la multa y se certificará lo conducente por el delito de desobediencia tipificado en el Código Penal.
Garantes de la norma
La comuna establece que los Consejos Comunitarios de Desarrollo son los garantes de la aplicación y el cumplimiento de la norma en sus cantones, sectores y comunidades.
También se indica que durante los 180 días que se utilizarán para que los pobladores se deshagan de estos productos se instalará un centro de acopio por parte de la municipalidad, que además trabajará con los Cocodes campañas de concientización y capacitación para el no uso de estos objetos.
Desde el 7 de octubre del 2016, Guatemala cuenta con al menos otros 7 municipios que han optado por prohibir el uso del plástico para contribuir al medio ambiente, el primero fue San Pedro La Laguna en Sololá.