El nuevo reporte preliminar de la Organización iraní de Aviación Civil, sin embargo, no llegó a culpar a los proyectiles TOR-M1 del siniestro del Boeing 737-800, operado por Ukraine International Airways.
Un Boeing de Ukraine International Airlines fue derribado por parte de militares iraníes el pasado 7 de enero.
De los 176 ocupantes fallecidos del Boeing, 10 eran pasajeros suecos, mientras que 82 eran iraníes y 63 canadienses.
Aunque inicialmente lo habían negado, tras la publicación de un vídeo en el que se observa el ataque, la República Islámica aceptó su responsabilidad en el caso.
Tras asumir la responsabilidad de haber derribado por error el avión ucraniano, cientos de iraníes han salido a las calles para protestar.
Ambos dispositivos habrían resultado dañadas en el accidente, pero se espera que su contenido pueda ser descargado y examinado por las autoridades.