Integrantes del Consejo Comunitario de Desarrollo (COCODE) de segundo nivel de San Juan Comalapa, Chimaltenango dieron a conocer su preocupación por las talas ilegales que se registran en el municipio durante las últimas semanas.
De acuerdo a la denuncia, el astillero municipal ubicado en la aldea Aguas Calientes es la más afectada.
René Sanic, representante del Cocode, indicó que en años anteriores únicamente funcionaba dos aserraderos en la población, ahora durante los últimos meses suman más de doce.
Cada día se observa camiones cargados de madera que se procesan sin ningún control de parte de las autoridades, es lamentable que durante los últimos años bosques completos han desaparecido; las fuentes de agua se han secado y se prevé que a lo futuro la situación se agrave. Indicó Sanic
Por su parte Nery Asturias del Instituto Nacional del Bosque (INAB) informó que existen estimaciones que el 95 por ciento de la madera que se comercializa es de manera ilegal.
Es necesario que las propias autoridades y vecinos denuncien estas anomalías que afecta los recursos naturales; la institución brinda varios programas de incentivos forestales que se debe aprovechar. Expresó Asturias
Agregó que los municipios de Comalapa, Póaquil y San Martin Jilotepeque son los más afectados por esta práctica desarrollada al margen de la ley.
Raymundo Cali, vecino del área, exhortó a la Policía Nacional Civil (PNC) a cumplir las leyes vigentes en materia forestal a no recibir soborno ni consentir a estas personas que destruyen los recursos naturales.
Con información de Norman Benavente