El alcalde local, Filipe Sousa, dijo que las víctimas incluyen 17 mujeres y 11 hombres.
El vehículo, con 55 personas a bordo, se salió en una curva y se fue por una cuesta empinada, en la isla portuguesa de Madeira.
La televisión local difundió imágenes de cadáveres diseminados en la cuesta en una zona rural próxima al Océano Atlántico.
Los lugareños afirman que el accidente ocurrió al atardecer, había luz del día y buen tiempo.
Las autoridades dijeron que investigan las posibles causas de la tragedia.
Madeira es un destino vacacional frecuentado por europeos.