En una playa de la ciudad neerlandesa de Vlissingen, el buque de dragado de arena Bonny River pasó demasiado cerca de la costa sin disminuir la velocidad.
La embarcación causó una enorme ola que obligó a los turistas a huir del lugar. Al menos siete personas resultaron heridas. Tres de ellos, un adulto y dos niños, de 3 y 5 años, fueron hospitalizados.