Las remesas se han constituido en uno de los pilares más importantes de la economía guatemalteca que benefician directa e indirectamente a miles de personas.
Es por ello, que con el descenso de envíos, se debe pensar en estrategias para hacer frente a éste impacto económico.
Rosario Martínez, analista de Migración y Desarrollo de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) explica que la disminución de remesas en el país, se apalancan las necesidades que tienen las familias beneficiadas. Pero agrega se requiere de un uso productivo de las mismas, lo cual debe ir acompañado por el Estado y de instituciones como el Ministerio de Economía, así como pequeñas y medianas empresas que puedan ir desarrollando emprendimiento y con ello generar mejor inversión.
Por su parte Álvaro Caballeros, Coordinador del área de migraciones del Instituto de Estudio Inter Étnicos de los pueblos indígenas, destaca que muchas familias no invierten adecuadamente sus remesas y es precisamente en el sentido que deben ser orientadas con algunas recomendaciones para hacer más eficiente el uso de las mismas.
También se debe considerar la posibilidad que las comunidades deben estar conectadas para apoyar proyectos comunitarios, en lo que llaman “remesas colectivas”, y sobre todo creo que es momento para apreciar de una manera mas humana y solidaria el sacrificio que algunas familias experimentan cuando tienen un migrante en el exterior. Destacó
Sin embargo, la pandemia, podría abrir oportunidades de contratación en Estados Unidos en actividades agrícolas.
Recientemente Estados Unidos ha cambiado sus políticas en un intento por frenar la migración irregular. Para ello ha ampliado la posibilidad de aperturar visas de trabajo temporal para la región centroamericana, no solo para el sector agrícola, sino también de servicios y el área de salud.
Esas condiciones van a tener un efecto muy importante, por un lado merma la posibilidad de migración, pero por otro lado brinda oportundides. Destaca Martínez de Flacso
Estima que más de 6 millones de ciudadanos, dependen del envío de remesas. Para este año se esperaba un ingreso de 11 mil millones de dólares, sin embargo, esta cifra será evaluada por el Banco de Guatemala.